ACCIDENTE MORTAL EN EL TRABAJO
El trabajo un derecho y una obligación que goza de
toda la protección del estado para que se desarrolle de manera digna y justa.
Siendo así, es deber de todo empleador brindarle a el trabajador todas las
herramientas necesarias para la seguridad y la salud en el puesto de trabajo
así como también es deber del trabajador cumplir y respetar todas las normas de
seguridad para evitar con ello la ocurrencia de accidentes de trabajo que
puedan perjudicar de manera grave tanto a las empresas como a los trabajadores
mismos.
Todas las normas creadas con el fin de proteger al
trabajador, desde la Constitución Política de Colombia hasta la más reciente
ley buscan siempre la manera de beneficiar a toda persona que esté trabajando con
el fin de brindarle beneficios en caso de accidente de trabajo como: prestaciones asistenciales (medicina
general, medicamentos,…) y prestaciones económicas en casos de incapacidades
temporales o permanentes, invalidez o muerte. Para esto es necesario, además de
obligatorio, que los empleadores informen mediante el diligenciamiento del
Formato Único de Reporte de Accidentes de Trabajo (FURAT) de cualquier tipo de
accidente a todas las entidades relacionadas y que intervienen, en este caso y
siendo la más importante, a la Administradora de Riesgos Profesionales (ARP).
Este formato además de brindar información acerca de
los accidentes ocurridos nos ayuda para poder tomar medidas correctivas y
preventivas que nos permitan brindar seguridad a los demás trabajadores y así
poder salvaguardar su salud y su vida, también nos muestra las consecuencias
que estos accidentes traen a la víctima, su entorno laboral y familiar y
también a su entorno social. Pero aunque contamos con la ayuda de este formato,
muchas veces la ausencia de datos confiables y sistematizados sobre la magnitud
del problema no permite que logremos ver y entender la importante pérdida
económica y social que significa un accidente ocasionado por el trabajo.
Un estudio realizado “encontró que los sectores más
expuestos a riesgos industriales potencialmente mortales, se encontraban en la
construcción, agricultura y relacionados, así como en el transporte y pesca.
Los oficios más peligrosos considerados son los peones de minería,
construcción, industria manufacturera y transporte, los conductores de vehículos
y operarios de equipos pesados”. Este estudio también demostró “que las causas
de los accidentes mortales en el trabajo se focalizan en: Accidentes con
vehículos, caída y salto desde una plataforma, caída y derrumbamiento de
objetos, resbalones tropezones y caídas, Accidentes de tráfico, maquinaria
peligrosa, enredarse y quedar atrapado y contacto con la electricidad” debido a
la gran cantidades de riesgos existente en las empresas y a la poca prevención
por parte de los trabajadores o de la misma organización.
Según reglamenta el Sistema General de Riesgos
Profesionales (SGRP), es responsabilidad del empleador velar por la seguridad
de sus trabajadores, no solo entendida como seguridad e higiene en el trabajo
sino también como su seguridad personal, garantizando la vida de sus
trabajadores, para ello hay que especificar qué tipo de responsabilidades
existen y quienes son directamente responsables en una empresa. Las
responsabilidades se dividen en cuatro que son: laboral (relación laboral o
contrato de trabajo), civil (prestaciones económicas para la indemnización por
daños y perjuicios), penal (causante del accidente o delito) y administrativa
(multa o cierre de la empresa por el incumplimiento de las normas de
seguridad). La responsabilidad laboral es trasladada por el empleador mientras
que la responsabilidad civil, penal administrativa recae sobre la empresa, sus
directivas y las personas que causen el accidente mortal.
El costo emocional y social causado por la muerte de
un trabajador a sus familias, compañeros de trabajo y a la sociedad, debido a
un accidente de trabajo en incalculable. Pero el costo económico, daños y
perjuicios ocasionados a la empresa derivados de los pagos por compensación,
gastos médicos, días de trabajo perdido y disminución de la productividad han
venido aumentando debido a la gran cantidad de accidentes de trabajo
registrados.
Para reducir estos accidentes es necesario contar
con un sistema de vigilancia que se encargue de la recolección sistemática, el
análisis y la interpretación de información de eventos, para poder así realizar
acciones de planeación, implantación y
evaluación de la práctica de salud pública. Todo con el fin de identificar los
eventos riesgosos y buscar la manera de prevenirlos para evitar más accidentes
que se pudiera presentar debido a los mismos riesgos. Para una correcta
vigilancia es necesario diligenciar el reporte de accidente de trabajo, hacer
una investigación del accidente y llevar un seguimiento del mismo.
En conclusión, el trabajo es un derecho de todas las
personas y es una obligación del estado brindarlo de una manera digna y justa
que preserve la integridad física y social de los trabajadores. Una manera de
proteger a los empleados en brindando todas las prestaciones sociales y
económicas en caso de accidentes de trabajo que generen incapacidades,
invalidez o muerte. Para brindar protección en caso de accidentes futuros es
necesario contar con la información de accidentes ocurridos con anterioridad
para poder tomar medidas preventivas sobre esos riesgos y para ello es
necesario contar con la colaboración de todo el personal de la empresa, tanto los
afectados como la alta dirección.